No sé si os sucederá, pero echo de menos ir a un concierto porque era una experiencia conjunta, de comunión con la música en la que se pueden compartir emociones. Me estoy poniendo sentimental, disculpadme.
Hoy os traigo una poesía inspirada en una pieza bellísima, perfecta para acompañarla de un buen café sólo... O con leche. Para vosotros cafeteros, espero que pronto nos encontremos en un concierto.
Pienso,
Tú,
tu cuerpo.
Cadencia pienso,
cuando tengo,
veo, atraigo,
tu cuerpo.
Cadenza
Implica
Movimiento.
Descendente, herido
escalado
abajo.
Implica
Tiempo.
Detenido,
pero no mucho,
Rallentando,
adagio,
non troppo.
Rubato.
Implica
espacio
para, entre,
caricias veladas,
en tu cuerpo,
que paran, que avanzan
que se detienen, que corren
y que no
no quieren
que no quieren cesar.
Implica
bocas que muerden,
intentos de subida,
caídas de rodillas,
besos agrietados,
Uñas…. Uñas
que arañan.
Cadencia.
En las manos no hay poesía
Hay artesanía, trabajo lento,
Como un panadero
que amasa humilde.
Y caliente, avivada
se lleva a su lengua de harina
los olores
del hambre ardida.
Cadencia
la luz desnuda, tenue
que te abriga el pecho marcado
de bocados de niño tierno.
Cadencia,
te acerca a mí
te aprieta con.tra.mí,
barroca, sin huecos,
disonante, percutida
constante, ascendente.
Cadencia.
Con las cuerdas de tu pelo
enredadas en mi puño,
tensándote la cara.
Y dominante,
subdominante,
y tónica en agudos,
Cadencia.
Rota,
estallada,
en el cielo
pones fin,
acabas
desecha
de
piedad
con, en
bendito
silencio.
BWV244. Erbarme dich. Orfeo 55, Nathalie Stutzmann
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